Símbolos del Paisaje Cultural Cafetero Colombiano – Segunda Parte

Introducción breve

En la primera parte de este conjunto de tres (3) publicaciones, compartimos una rápida introducción respecto a los orígenes de la certificación lograda ante la UNESCO, describimos someramente el Campo de Acción para el Logosímbolo diseñado, e hicimos una breve reseña sobre el significado de La Mano como elemento fundamental e integrante representativo de nuestro Paisaje Cultural Cafetero Colombiano.

En esta segunda parte, siguiendo una metodología similar, habilitamos las secciones para La Rana, La Guadua, El Balcón y Las Flores, como elementos fundamentales, no sólo del símbolo, sino sobre todo de lo que representan como principios filosóficos y de valores que tenemos la obligación moral y real de preservar.

Entremos entonces en materia:

Significado de La Rana

La Rana 1

La Rana: Representa la pureza de un entorno. Está asociada a la importancia de proteger el medio ambiente, especialmente en época como la actual en la que hay tantos factores y amenazas que lo pueden afectar.

Al observar la Rana en este símbolo, estamos llamando la atención sobre los riesgos que pueden afectar el Paisaje Cultural Cafetero Colombiano.

Un paisaje productivo como éste debe priorizar y fomentar la actividad cafetera por encima de otras actividades complementarias, para que los valores culturales y el reconocimiento del territorio como Patrimonio Mundial permanezcan para esta y futuras generaciones.

La Rana 2

Esta región con su multiculturalidad y belleza constituye un reto para el ordenamiento territorial, las autoridades ambientales y los comités de cafeteros como principales gestores de política.

Sin embargo, somos todos, los responsables de conservar y cuidar el Paisaje Cultural Cafetero Colombiano, patrimonio de la humanidad.

De otro lado la rana representa la cultura arqueológica de toda la región, que alberga un potencial importante de evidencias para el conocimiento del pasado precolombino y colonial que constituyen parte fundamental del patrimonio arqueológico de Colombia.


Significado de La Guadua

La Guadua 1

La Guadua, que acompaña a nuestro café, representa la riqueza hídrica de la región.

La importancia de la guadua en el PCCC es resaltada a lo largo de todo el expediente de nominación del sitio ante la UNESCO. Se relaciona el manejo ambiental con la producción cafetera y con su contribución a la arquitectura tradicional.

Es un sinónimo de agua, de biodiversidad y de equilibrio

La Guadua 2

Además de su contribución al manejo ambiental, juega un papel básico en el proceso constructivo de la arquitectura y el patrimonio mueble de toda la región, por sus enormes propiedades estructurales, por sus cualidades estéticas y aporte a los espacios y objetos.

Sirve como forraje para animales y alimento para peces.

También favorece el ciclo del agua, al tiempo que le brinda protección a la tierra frente a erosiones ya que tiene un sistema de raíces capaz de crear un mecanismo inigualable, cosiendo o amarrando el suelo.

Al ser un recurso renovable, puede utilizarse para protección de paredes y suelos, fabricación de papel, briquetas de combustible, además de su importancia en las construcciones de la época de la colonización antioqueña.

A la guadua se le atribuyen poderes sismorresistentes por las fibras longitudinales que facilitan su tensión paralela, así como por su dureza y durabilidad.

Por esto y mucho más, la guadua cuenta con aliados que fomentan su conservación, cultivo, investigación; igualmente se busca estimular la producción con fines industriales y agroindustriales, como un proyecto que apoya la sostenibilidad ambiental frente a los efectos del cambio climático, y que puede ser fuente de empleo y crecimiento económico.

La guadua está presente en viviendas, artesanías, muebles, esculturas y mucho más.


Significado de El Balcón

El Balcon logo

Hasta el siglo XIX, la arquitectura doméstica tradicional colombiana estuvo determinada por la influencia española, especialmente del sur de la península y así, por la cultura árabe.

De allí la importancia del Balcón en el Logosímbolo del Paisaje Cultural Cafetero de Colombia.

Esta tradición en la que se destacan el manejo espacial, los materiales y las técnicas constructivas, definió la arquitectura del PCCC, inicialmente durante la colonización antioqueña.

El Balcon 3

Hacia finales del siglo XIX, la arquitectura se afianzó y se redefinió como resultado del auge producido por la economía cafetera, complementándose con una riqueza de expresiones formales, como los calados y la talla en madera, tanto ornamental como estructural y funcional.

Entre las técnicas de construcción, las primeras fueron estructuras de tapia pisada, una antigua técnica de muros de tierra cruda que llegó a nosotros proveniente de Asia por intermedio de los europeos. Sin embargo, debido a su rigidez estructural, la tapia pisada no fue la solución más adecuada para resistir los frecuentes y fuertes movimientos sísmicos de la región.

En esta coyuntura, la técnica del bahareque tuvo gran acogida y corresponde a un sistema de muros construidos sobre un entramado de maderas dispuestas vertical y horizontalmente con riostras [1] inclinadas, que se recubre con esterilla de guadua, que se caracteriza por su gran resistencia y ductilidad.

Este tipo de estructura tiene mucho menos masa que la tapia pisada o que un muro de mampostería de ladrillo o de piedra, lo cual lo hace más liviano, más elástico y, por tanto, muy resistente a los movimientos sísmicos.

La Guadua 3

Estas características hicieron que se acuñara el término “estilo temblorero” para reflejar esta cultura constructiva que se adaptó a las particulares condiciones del entorno.

El bahareque se utilizó de manera masiva para construcciones de todo tipo: viviendas, iglesias, alcaldías, cuarteles, haciendas, graneros, establos y, posteriormente, todas las construcciones asociadas al cultivo y beneficio del café.

La madera, proveniente de los ricos y abundantes bosques vecinos, fue el material fundamental de estas construcciones: la madera rolliza y la madera aserrada se usaron tanto en estructuras interiores como exteriores.

Las viviendas rurales están muy integradas al paisaje circundante y, por ello, permiten su disfrute y relación casi desde cualquier parte.

En la tipología resaltan las construcciones en forma de I o de L, en los que se establecen corredores perimetrales en todo el entorno del inmueble. Allí se desarrolla la vida social de la familia y se contempla el paisaje de las montañas que caracterizan el Paisaje Cultural Cafetero.

La ubicación de los nuevos poblados en los filos de las montañas no es una característica debida al azar, sino que resulta de la intención de unir este vasto territorio por medio de caminos, en la medida que resulta mucho más fácil trazar los caminos por las crestas de las montañas que en la profundidad de los cañones.

Cuando se observa el balcón, viene a la memoria la época en la que se fundó el pueblo: la asignación de lotes en torno a la plaza central, empezando por los fundadores, que siguieron un patrón similar: a partir de la plaza se delimitaban las manzanas aledañas y se fijaban los sitios para las construcciones más importantes, como el templo y el cabildo.

De esta manera, sobre esa topografía ondulante, en lo alto de las montañas, se formaron pueblos de tapia, bahareque y teja de barro, con puertas y ventanas de fuertes maderas de la región adornadas con calados, tallas y apliques.

El Balcon 4

Zaguanes, patios y corredores decorados con flores, pájaros y aromas silvestres caracterizaron los pueblos de la colonización antioqueña que hoy integran el PCCC (Sarmiento, 1995).

Entre las edificaciones sobresalen por su arquitectura los templos parroquiales y las capillas de hospitales, cementerios y algunos colegios religiosos.

La mayoría de los templos que existen hoy fueron construidos en la última década del siglo XIX y durante las primeras del siglo XX, siguiendo las tendencias de herencia europea.

Son ejemplos de este período los templos de Aguadas, Pácora, Salamina y Salento (tendencia estética), y la tendencia neogótica en los templos de Chinchiná, Calarcá, Guática, Marsella, Santa Rosa de Cabal y Sevilla.

Entre los cementerios también se destacan elementos de diseño arquitectónico de gran importancia como en los de Circasia y Marsella -que son bienes de interés cultural del ámbito nacional- y el de Salamina.

El centro histórico de El Cairo, en el Valle del Cauca, cuenta con una declaratoria como bien de interés cultural del ámbito municipal y presenta un alto nivel de homogeneidad en la arquitectura de la población.

En resumen, la arquitectura en el Paisaje Cultural Cafetero de Colombia representada en el balcón es el resultado y desarrollo de la simbiosis de una serie de patrones culturales de herencia española que se recrean con nuevos materiales en la región, y a los que se une el componente de la cultura indígena y las técnicas constructivas fruto del mestizaje.


Significado de Las Flores

Las Flores 1

El turno es para las Flores.

Las actividades humanas afectan e impactan, algunas veces en forma positiva los ecosistemas: Cuando se implementan buenas prácticas asociadas al cultivo, a la preservación de los bosques nativos, de corredores y árboles protectores de nacimientos de agua, son acciones que fomentan el cuidado del medio ambiente, permiten que los animales, los árboles, las Flores vivan y convivan con las comunidades.

De esta forma se garantiza la sostenibilidad ambiental del PCCC.

La riqueza de la región andina colombiana -en donde se encuentra el Paisaje Cultural Cafetero- la define como la de la mayor diversidad de especies de plantas en el país: 310 familias, 1.750 géneros y 9.313 especies constituyen ese patrimonio natural del PCC.

Pero también existen actividades que impiden que la flora y la fauna resistan los impactos: Algunos tan de fondo como son el ordenamiento del territorio, que autoriza usos del suelo sin considerar el impacto a los ecosistemas.

La quema de basuras, la contaminación de las quebradas, la minería, el uso de químicos; factores como el turismo masivo, que superara la capacidad de carga del lugar y que no respeta el medioambiente, por mencionar solo algunos.

Flor del cafe

Con esta fotografía ilustramos la verdadera flor del café, tan emblemática para nosotros que además de conservar en ella las esperanzas e ilusiones de tantas familias campesinas y caficultoras, se ha constituido en fuente de inspiración para poemas, canciones y varios escritos literarios.

Custodia, además, el potencial sobre el cual se ha basado por muchos años, el cimiento fundamental de nuestra economía, manteniéndose en el pedestal de ser el principal producto agrícola de exportación, con especial reconocimiento y calificación a nivel mundial.

Con el ánimo de apoyar y gestionar desde la FNC actividades que los caficultores realizan desde sus fincas y aunando esfuerzos con las autoridades departamentales y entes de control se ha formulado el Programa para la Sostenibilidad Ambiental del PCC.

De aquí la importancia de que las flores nos permitan recordar siempre que nuestro paso por el Paisaje Cultural Cafetero, como habitantes permanentes o como visitantes temporales deja su huella. De nosotros depende que este impacto sea positivo.

Recordando lo que nos dice la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), inscribir un paisaje como bien de interés cultural de la humanidad requiere articular esfuerzos en todos los ámbitos, para su cuidado y protección.

Es reconocer que existe un patrimonio natural y/o cultural único e irremplazable, que se ve amenazado por diferentes razones, entre ellas el paso del tiempo, descuido, falta de uso, por la evolución acelerada de la actividad humana, y por lo tanto requiere de un sistema de protección colectiva, que va más allá de la frontera veredal, municipal o nacional.


Epílogo de la segunda parte

Contando ya con la definición de estos primeros cinco elementos fundamentales, vamos pudiendo visualizar mejor el detalle de lo que simplemente se enunciaba en el capítulo para el Campo de Acción.

Podemos ir entendiendo, por ejemplo, que las expresiones “Paisaje”, “Cultural” y “Cafetero”, al actuar de manera integrada, logran producir un concepto mucho más profundo, de lo que se obtendría con las simples definiciones en forma aislada.

Y este primer “macro-logro” se puntualiza y describe más claramente, al invitar para que aparezcan en escena los elementos componentes de todo el concepto y la estrategia de manejo que se propone llevar a cabo de manera colectiva y mancomunada, empezando por el papel fundamental de La Mano del hombre, cuando de manera respetuosa y proactiva, interactúa con el hábitat de La Rana; La Guadua con su aplicación importantísima en El Balcón junto con toda una historia evolutiva en el diseño y la construcción, adobado esto con el complemento de Las Flores que otorgan el ingrediente de la belleza concedidos por la naturaleza y nuestro gran Creador.

Pero aún no hemos terminado, pues nos falta integrar a este conjunto armónico otro par de elementos fundamentales como son El Colibrí, La Mariposa, La Montaña y la gran columna vertebral de nuestra economía representada en el cultivo del Café, temas estos que estamos tratando muy próximamente en la tercera y última entrega respecto a esta miniserie puntual.

Gracias por haber llegado hasta acá con su lectura y le invitamos muy cordialmente a que nos acompañe con la próxima publicación.

Le deseamos un día maravilloso y pleno bienestar.

Publicación ISAN-0048-010424 – AgroEscritor

Glosario de términos:

[1] Riostras => Pieza metálica, de madera o de hormigón que sirve para asegurar la rigidez de un elemento constructivo

3 comentarios en «Simbolos del PCCC – parte 2»

  1. gracias agro-escritor porque apesar de pertenecer a esta hermosa familia , no he tenido el privilegio de disfrutar de toda esta riqueza cafetera de nuestro bello país, a traves de tus escritos claros e ilustrativos, aprendo y me trae gratos recuerdos y me hace sentir mucho mas cerca..un abrazo y que Dios te acompañe con muchos exitos venideros

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    • Hola Menchita, mil gracias por este emotivo y muy valioso mensaje pues, con estas “pildoras” efectivas es que los primerizos, que estamos queriendo con especial entusiasmo el aprender a escribir, nos nutrimos y tomamos “nuevo combustible” para seguir con esta exigente y dura pero encantadora misión.

      Fuerte abrazo y mil bendiciones

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  2. Qué precioso e ilustrativo artículo sobre los símbolos del PCC, es un orgullo pertenecer a él y sentir que realmente de todos esos símbolos estamos hechos, eso somos… tradición ancestral, espacios campesinos, comidas tradicionales y un fuerte arraigo por nuestras raíces.

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